Nirvana es la banda que lo cambió todo, impuso un nuevo estilo y una nueva imagen, derruyendo casi por completo el legado del Glam.
Hace casi 27 años, el mundo se vio costernado por la noticia del suicidio del Kurt Cobain, dando paso a una serie de teorías y especulaciones. Incluso Gus Van Sant, de manera ficcionada retrata los últimos días del líder de Nirvana en ‘The Last Days’, película del 2005; es una historia que nos sigue fascinando.
Entre tanto, salieron muchos documentales, libros y más teorías sobre la muerte de Kurt Cobain. El misterio prevalece y alimenta la leyenda. No era el típico frontman: retraído, tímido y algo huraño, la fama le cayó bastante mal.
Problemas de salud, problemas mentales, adicciones y una relación tormentosa con Courtney Love, la controvertida viuda, a la cual se la sigue acusando de haber provocado la muerte de Kurt Cobain.
En un episodio no tan conocido, tres semanas antes del suicidio, se registró una disputa conyungal; la policía de Seattle, el 18 de marzo de 1994, recibió una llamada de auxilio. Courtney Love, le dijo a la policía que su esposo, se había encerrado en un baño con la intención de quitarse la vida. Esa misma noche, la policía confiscó un revolver calibre 38, una pistola semiautomática, un rifle y una segunda pistola escondida entre los enceres del hogar. La policía también confisco 25 cajas de municiones y varios frascos de fármacos.
Más allá de las especulaciones, lo cierto es que Kurt Cobain no se sentía cómodo con la banda ni con su vida. La fama y la presión que conlleva, nunca fueron del completo agrado del guitarrista, que ansiaba tener una vida un poco más sencilla, lejos de la mirada conspicua de los paparazzi.
Hablar del suicidio nunca es fácil, nunca podremos entender las razones que motivan el acto, y la película Gus Van Sant lo muestra bien, es una decisión que se toma de un momento a otro, sin previo aviso.
Desde luego, ahora, habiendo analizado con detalle todos los hechos, podemos concluir que esa siempre fue la voluntad de Cobain: acabar su dolor. La leyenda sigue su curso y seguirá alimentando el imaginario popular, en años venideros, es parte del misticismo que rodea a Nirvana, la banda que cambió el curso de la música.