En las últimas horas, a través de un Twitter, se conoció la molestia de Todd La Torre vocalista de Queensrÿche, por las recientes determinaciones tomadas por el Gobernador de Texas, Greg Abbott. Dentro del paquete de medidas adoptadas, está previsto levantar prácticamente todas las restricciones vigentes. El vocalista teme un rebrote que afectará nuevamente a la industria musical.
A partir del 10 de marzo, todos los negocios en Texas, podrán abrir al 100% de su capacidad, por primera vez en casi un año. En función a los protocolos adoptados por iniciativa propia, los negocios podrán mantener ciertas restricciones como el distanciamiento físico o el uso de barbijos.
Es lo que motivó el malestar de La Torre, que no dudó en proferir calificativos despectivos ante las medidas. ‘Maldito idiota. Esta es la razón por la cual nuestra industria será la última en abrir. No hemos aprendido nada. Tic Tac’.
Las actividades económicas referidas, también aluden a eventos deportivos y conciertos, en los cuales ya no será obligatorio el uso de barbijos; una medida bastante criticada, a la que se oponen especialista en salud, señalando que todavía no es el momento oportuno, para levantar las restricciones.
La Asociación de Maestros del Estado de Texas también se pronunció, reconociendo los avances realizados para contener los efectos nocivos de la pandemia, pero señalando sus limitantes. Su presidente, en un comunicado de prensa expresó:
‘El número de contagios ha decaído, pero todavía tenemos 1,637 nuevos casos confirmados de COVID-19 en Texas, el día de ayer [1º de marzo], tuvimos 59 decesos. Más de 5,600 pacientes todavía se encuentran internados en los hospitales de Texas, y todavía desconocemos el comportamiento de las variantes más contagiosas y letales del virus.’
Relajar las medidas de seguridad, en las condiciones actuales parece desatinado, aunque es necesario mencionar que 3.5 millones de tejanos recibieron la primera dosis de la vacuna, y 1.8 millones recibieron ambas dosis, en un Estado que cuenta con 29 millones de habitantes. Si bien, el ritmo de vacunación es óptimo, Texas está lejos de haber superando los efectos colaterales.
No es el momento de bajar los brazos, más bien la prudencia se impone, para evitar nuevos rebrotes, que es la principal preocupación de Todd La Torre; en caso de producirse, los conciertos se seguirán cancelando.