Con el inminente final de Kiss, embarcados en el End of the Road Tour, temporalmente suspendido por la contingencia de la pandemia, sus miembros ya están pensando a futuro. Desde algunos años, Paul Stanley cofundador de Kiss, ha mostrado una inusual actividad fuera de la banda. Unos de los proyecto que ha tenido mucha repercusión últimamente es: Soul Station, al alejarse por completo del sonido que forjó con Kiss.
El disco estará disponible el próximo 19 de marzo, y es un homenaje a las raíces musicales de Paul Stanley, antes que descubra la fuerza bruta del rock británico. Es una experiencia única, considerando que el trabajo del guitarrista, fuera de Kiss es bastante escaso. El 2006, salió ‘Live to Win’ y fue una verdadera sorpresa, aunque pudo ser un disco de Kiss. ‘Now and Them’, que cuenta con catorce canciones, entre covers y originales, es una anomalía en sí. No deja de ser muy interesante y Paul Stanley luce y se escucha mejor que en Kiss.
Todos recordamos los trajes y el maquillaje, Kiss es una de las mejores bandas en vivo hoy en día, pese a las limitaciones vocales de Paul Stanley, y sus pelucas y tanto ridículas; el espectáculo que ofrecen es colosal, y lo han demostrado en año nuevo, rompiendo varios récords Guinness, es una excelente manera de decir adiós. Aunque Kiss, puede ser criticado por muchas razones, con justa razón, su legado es inmortal. La banda ya no da más, pero siempre habrá un horizonte musical más allá del rock convencional. Paul Stanley lo dio todo en los escenarios y se ha ganado el derecho de retirarse y hacer el tipo de música que realmente lo satisface.
Durante años, Kiss estuvo enfrascada en una imagen, en el estereotipo de lo que deberían ser; el ‘Sonic Boom’ suena un poco artificial, porque Paul Stanley tiene una idea muy clara de qué es la banda y como tiene que sonar. El ‘Monster’, funciona mejor, pero la banda sigue un guion, copiándose a sí misma. Soul Station, es un momento de quiebre, lejos de su personaje, lejos de la presión de los estadios, lejos de los negocios y del ego de Gene Simmons, Paul Stanley se ha ganado su libertad.
Como bien lo dice Paul Stanley, es un cantante y puede cantar lo que bien le dé la gana, y este estilo se adapta mejor a sus limitaciones vocales, propias de la edad. Estamos ansiosos por escuchar el disco.