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La noche del Jueves 14 de Agosto, tuvimos la oportunidad de volver a encontrarnos con una de las bandas más emblemáticas del Thrash Metal estadounidense: TESTAMENT quien volvían al Teatro Flores de Buenos Aires. La velada comenzó con las bandas locales Fisión Nuclear y Pucara, que se encargaron de calentar motores con descargas de puro Thrash Metal argentino, logrando que la audiencia, que iba llenando rápidamente el recinto, entrara en calor desde temprano.

Tras unos minutos de retraso respecto al cronograma, se escuchó la icónica canción «Fight for Your Right (To Party)» de los Beastie Boys, como preámbulo antes de que los veteranos del Thrash del «Bay Area» de San Francisco subieran al escenario. Sin duda, esto generó expectación y una exponencial energía en los presentes.

El show arrancó con un triple de clásicos de los años 80, que sirvieron para avivar aún más a la multitud: «Practice What You Preach», «Sins of Omission» y «Perilous Nation». Desde el primer momento, se desató un pogo muy activo y enérgico, marcando la intensidad del espectáculo. A pesar de que el sonido no fue perfecto en los primeros temas, la calidad después mejoró considerablemente, permitiendo escuchar claramente las guitarras de Alex Skolnick y Eric Peterson, quienes jugaron un papel fundamental con su arsenal de riffs. Ambos guitarristas estuvieron bien acompañados por el bajista Steve DiGiorgio, que mostró una presencia destacada y contagiosa durante toda la noche.

Uno de los puntos fuertes del setlist fue la selección de canciones, entre ellas «Trail of Tears», que rara vez se toca en sus shows, y que sonó excelente, seguida de otros clásicos como «Electric Crown», «Souls of Black» y «Return to Serenity» que fueron muy bien recibidas y coreadas con el mosh pit a tope.

Algo que me encanto del show, fue ver a Chuck Billy con el carisma y buena onda de siempre, haciendo mucho «Air Guitar», muy comunicativo y receptivo con los clásicos canticos argentinos que el público se hacia notar su presencia en un Teatro Flores que rozaba el «Sold Out».

Cerca del tramo final, se hizo presente Chris Dovas, el miembro más nuevo en la banda, quien sorprendió con su control y precisión en su solo de batería. Desde el primer golpe, atrajo la atención de la audiencia y dejó claro por qué fue elegido para ese puesto. Luego, la banda tomó un descanso para retomar con «First Strike Is Deadly», un tema arrollador que hizo vibrar a todos, reflejando en cada nota la felicidad del público argentino.

Finalmente, tras un breve «encore», los miembros de TESTAMENT regresaron al escenario para descargar sus últimos cartuchos: «Over the Wall», «More Than Meets the Eye» y la espectacular «Into the Pit». Este cierre fue una verdadera batalla de Thrash, que dejó bien en claro que Testament sigue en plena forma. Con un setlist de los mejores en tiempos recientes, con canciones ejecutadas con precisión y pasión, quedó demostrado que los integrantes mantienen vivo ese fuego sagrado que los hace una banda imparable en la escena mundial del Thrash Metal.

Hablar del show de TESTAMENT va más allá de la intensidad de su música rápida y pesada; estos veteranos se mostraron muy a gusto durante toda la presentación, algo que se notaba muy genuino, esa sinergia con el público fue realmente espectacular, La banda parecía más que nada un grupo local que habla en otro idioma, jugando de igual a igual con el público, Es algo que pocos grupos logran y para mi, hace a TESTAMENT en un referente único en la escena del Thrash Metal mundial.

Crónica por Alejandro González
Fotos por:
Luis Mogollón

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