Formado en 1964 por Syd Barret, Nick Mason, Roger Waters, Richard Wright y Bob Klose (quien renunció en 1965), Pink Floyd se convirtió en una de las bandas más grandes de todos los tiempos en las décadas siguientes, con álbumes muy exitosos como ‘The Dark Side Of The Moon’ (1973) y ‘The Wall’ (1979).
Con el liderazgo de Barrett, el grupo lanzó dos singles que entraron a los charts y el exitoso álbum debut ‘The Piper At The Gates Of Dawn’, en 1967. Después invitaron a David Gilmour a unírseles. En 1968, debido al deterioro mental de Barrett, los demás miembros decidieron despedirlo.
Wright, Waters y Gilmour después produjeron los discos solistas de Barrett en 1970, para ayudarlo. Pero la última vez que vieron a su ex compañero fue en 1975, cuando apareció sin haber sido invitado a las sesiones del álbum ‘Wish You Were Here’ y se quedó mirando las grabaciones de la banda. Estaba gordo, pelado y con las cejas rapadas, lo que inspiró una escena de la película ‘The Wall’.
En entrevistas dadas en las últimas décadas, David Gilmour explicó por qué él y los otros miembros de Pink Floyd nunca volvieron a hablar con Barrett hasta su muerte a los 60 años en 2006. Según los miembros de la banda, ellos no podían visitar o hablar a Syd Barrett porque su familia había dicho que todo lo relacionado a la banda, especialmente los músicos, podría herir sus sentimientos. Por eso decidieron decirles a Waters, Gilmour, Mason y Wright que lo dejaran en paz y que no le hablaran más.
En el año 2006, antes de la muerte de Barrett, le preguntaron a Gilmour si había considerado invitar a Barrett a tocar en su reciente disco solista, ‘On An Island’ y él explicó por qué no podía acercarse a su ex compañero de banda. ‘No, yo dejo a Syd en paz. Respeto lo que la familia quiere para él. Me encantaría ir a verlo uno de estos días y tal vez lo haga, antes que sea demasiado tarde.’ Pocos meses antes de la muerte de Barrett, en otra entrevista, Gilmour expresó su deseo de ver a Barrett: ‘Sí, me hubiera gustado (haberlo visitado en las últimas décadas), pero su familia está convencida de que Syd debía estar aislado. Pero eso no significa que tarde o temprano eso no ocurra.’
En el año 2007, Gilmour contó cómo se enteró de la muerte de Barrett: ‘Su cuñado me llamó. Me sentí muy triste. Fue una pérdida trágica. También me sentí muy arrepentido por no haber ido a verlo en todos esos años. Su familia había dicho que sería mejor si la gente no lo veía. Pero yo no pensé que se aplicaba a mí. Así que me arrepiento por no haber sido más optimista con respecto a eso. Yo sabía donde vivía. Podría haber ido para tomar una taza de té. Syd y yo fuimos amigos desde adolescentes y teníamos muchos recuerdos que no tenían nada que ver con Pink Floyd. Algunos de ellos podrían haberlo animado.’
En el año 2008, Gilmour habló sobre cuán triste había sido la muerte de Barrett: ‘Obviamente, la noticia de su muerte fue enormemente triste. Yo sabía que había estad enfermo por mucho tiempo. Pero la realidad fue terriblemente triste. El tema es que el Syd que yo había conocido se fue hace mucho tiempo. Si me arrepiento de algo es de no haber sido más enérgico con la familia y de no haber ido a visitar a Syd en Cambridge. Pero es difícil negociar ¿verdad?’
Gilmour conoció a Barrett mucho antes de Pink Floyd, cuando tenía 14 o 15 años, como recordó en una entrevista en 2006: ‘Cuando yo tenía 14 o 15 año. El era alguien a quien la gente señalaba en la calle. Tenía carisma y magnetismo. Era divertido. Ingenioso. Nada se le escapaba. Estaba actualizado en todo. Muy leído, era un tipo listo. Yo salía con él, iba a su casa. Cuando me mudé a Cambridge Tech solíamos encontrarnos en la escuela de arte casi siempre para almorzar y escuchar Bo Diddley y ‘Come on’ de los Rolling Stones.’
En 1996, el tecladista de Pink Floyd, Richard Wright, dijo que la madre de Syd les pidió a él, Roger Waters, David Gilmour y Nick Mason que no hablaran con su ex compañero de banda, porque cada vez que veía algo que le hiciera recordar a Pink Floyd se deprimía por semanas. ‘No lo vemos. Aparentemente, si recuerda a Pink Floyd y cuando él era parte, se deprime por semanas. Su madre nos pidió mantenernos alejados hace algunos años. Aparentemente, la mayor parte del tiempo él está feliz, pero nuestros rostros podrían disparar un fallo.’
‘¿Hubiera pasado de todas formas o fue por una gran sobredosis de ácido? Quién sabe. Yo sospecho que hubo un poco de ambas. Solo que una semana estaba bien y a la siguiente semana se dio vuelta y fue completamente diferente. Una tragedia terrible.’
Por su parte, Roger Waters habló sobre Syd y las droga en 2008: ‘Yo probé el ácido una sola vez. Era muy puro, teníamos acceso al verdadero. Fue extraordinario, pero no era algo que quisiera repetir. No sé lo que él hubiera hecho sin ácido, pero no creo que Syd se haya vuelto loco por usar demasiado ácido. Los síntomas de enfermedad mental que tenía fueron exacerbados por el ácido, pero no creo que eso lo haya enfermado.’
‘Cuando él murió, se había ido hacía muchos años. Cuando escuché que estaba enfermo, traté y no logré contactar a su hermana para preguntar si podría hacer algo. Pero no había nada que hacer. No fue que él necesitara dinero. Se hizo todo lo que se podía hacer por él. La última vez que lo vi fue hace un par de años. Después de que apareciera en las sesiones de ‘Wish You Were Here’. Me topé con él en el Harrods donde él iba a comprar dulces. Pero no hablamos, se escabulló.’