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Durante uno de sus shows de la gira “Metal Tour of the Year”, el frontman de Megadeth, Dave Mustaine, se disfrazó de incógnito, ataviado con una capucha que hacía relativamente difícil distinguirle entre el público de su propio concierto, y se consiguió colar en las gradas para sorprender a un niño pequeño regalándole varias uñas de guitarra.
Actualmente, Megadeth, Lamb of God, Trivium e In Flames están de gira por Estados Unidos, y parece que, fuera del escenario, también están disfrutando. Matt Heafy, de Trivium, fue visto practicando el shamisen, un instrumento tradicional japonés de tres cuerdas, en una ducha durante el viaje y, en otra parada, Mustaine y el baterista de Megadeth, Dirk Verbeuren y el entrenador de jiu-jitsu brasileño que acompaña a estas bandas en la carretera, Reginaldo Almeida, escalaron una valla en busca de un atajo hacia el concierto donde iban a tocar. El salto les podría haber costado caro.
Sin embargo, el momento más enternecedor de todos ha sido este, en el que Mustaine, totalmente de negro y con su capucha, se ha “infiltrado” entre el público del concierto para sorprender a estos pequeños, que no se podían creer a quien estaban viendo desde sus asientos. De hecho, para mantener su anonimato, el músico no dijo ni una sola palabra, haciendo solo gestos a los niños, mientras sus padres parecían no darse cuenta de lo que estaba pasando. ¡Gran sorpresa se llevarían al encontrarse con las uñas de guitarra!
Llegando al final del vídeo, Mustaine lanza un beso a la gente, les dice adiós, se levanta y se marcha. ¡Ya nos gustaría que nuestros artistas nos sorprendieran así!