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Una de las noticias que más me cuesta escribir, entre lagrimas y sentimientos de recuerdos toda una vida escuchando a esta leyenda de la música mundial.

Fallece Ozzy Osbourne, el Príncipe de las Tinieblas: el mundo del rock pierde a una de sus leyendas más grandes.

Londres, 22 de julio de 2025 — El mundo del rock y la música pesada está de luto: Ozzy Osbourne, el icónico cantante británico y fundador de Black Sabbath, falleció hoy a los 76 años, dejando tras de sí un legado inmortal que marcó generaciones enteras y dio forma al heavy metal tal como lo conocemos.

La noticia fue confirmada por su familia en un comunicado conmovedor:

“Con profundo dolor anunciamos que John Michael ‘Ozzy’ Osbourne ha partido rodeado de sus seres queridos. Fue un esposo, padre y abuelo devoto, pero también un artista extraordinario cuyo espíritu indomable inspiró a millones. Su música y su energía vivirán por siempre.”

Ozzy, apodado “El Príncipe de las Tinieblas”, no solo fue la voz de Black Sabbath, sino también un pionero del metal que rompió barreras, escandalizó al mundo y, sobre todo, emocionó con su autenticidad brutal. Desde su irrupción con Sabbath a fines de los años 60 hasta su longeva y turbulenta carrera solista, supo reinventarse una y otra vez, convirtiéndose en una figura tan controversial como entrañable.

En los últimos años, Ozzy había enfrentado numerosos problemas de salud, incluyendo un diagnóstico de Parkinson y complicaciones derivadas de lesiones antiguas. Pese a ello, su espíritu jamás se apagó: seguía grabando música, participando de eventos y dejando mensajes cargados de humor negro y sabiduría vivida.

 

La comunidad musical ya ha comenzado a rendir tributo a esta figura irrepetible. Grandes nombres como Tony Iommi, Rob Halford, James Hetfield y Dave Grohl expresaron su dolor y admiración por quien fue, sin lugar a dudas, una de las piedras fundamentales del rock pesado. En todo el mundo, fanáticos encienden velas, hacen sonar “Iron Man” o “Crazy Train”, y recuerdan cómo la voz inconfundible de Ozzy los acompañó en los momentos más oscuros y luminosos de sus vidas.

Hoy, la música pierde a un gigante. Pero su leyenda, como sus riffs y alaridos, seguirá retumbando por la eternidad.

Descansa en paz, Ozzy. Gracias por todo.

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